CYNTHIA HOTTON

Diputada denunció a una banda que secuestraba mujeres embarazadas

La legisladora Cynthia Hotton denunció una red que secuestra mujeres embarazadas para luego quedarse con los recién nacidos y venderlos a extranjeros

Elizabeth Garrido (Infobae.com)

La diputada por el PRO a nivel nacional viajó a Posadas, Misiones, para recorrer la zona y profundizar un anteproyecto de modificación de la Ley de Adopción. Pero nunca pensó que se podría encontrar con una sorpresa más que siniestra.

En su paso por el hogar "El Refugio", el cual aloja a 56 niños judicializados y a algunas madres solteras, la diputada Cynthia Hotton se encontrón con la prueba de los ancestralmente conocido pero que nunca deja de impactar. "Cuando estuve allí, las mamás, jóvenes embarazadas de varios meses me contaron que se encontraban en ese lugar porque vivían en villas y sabían que podían caer en manos de secuestradores que trafican con sus hijos".

Según la legisladora, eran varias las mujeres que relataban la situación pero que se negaban a denunciarlo a la policía al sostener que había "connivencia entre las fuerzas de seguridad y los delincuentes".

"Gente del lugar afirma que es una red que tiene desde jueces hasta gente de la policía implicada y que el poder político lo tapa".

La situación no queda en la ciudad de Posadas, sino que se extiende a Oberá, en donde, señala, hay denuncias de ventas de bebés en donde "profesionales que trabajan en esos hospitales los venden por dos pesos".

Hotton relata cómo las madres embarazadas pasan días enteros tras las rejas de "El Refugio" a la espera de un parto normal y buscando escapar de un peligro, al parecer, cotidiano en la zona.

Casos sin Justicia
La hermana Marta Pelloni es una figura visible de la lucha contra las redes de trata de personas y el tráfico de niños. En diálogo con Infobae.com, en un pequeño descanso por su paso por Buenos Aires, la religiosa destaca que "hasta el momento, todas las denuncias que ha realizado sobre el tema no han llegado a tener justicia".

Pelloni, quien sufrió un accidente en su llegada a Buenos Aires en el que se fracturó un brazo, destaca que en la mayor parte de los casos denunciados "se compró al padre biológico" y se cesa con la denuncia. También señala la participación en este tipo de hechos de "jueces truchos", como figuras cotidianas en el interior del país.

La pobreza, la falta de atención y una práctica cruelmente común hacen que el robo de niños y la trata de personas parezca un hecho menor a pocos kilómetros de la Capital Federal.

"Este tipo de hechos ilícitos da mucho dinero porque es parte y está facilitado por la globalización. Es un dinero mal habido, que viene del blanqueo del narcotráfico, y que tiene relación directa con la trata de personas: mujeres engañadas que las vuelven adictas y que luego sirven de mulas". Pelloni sostiene que los hijos de estas mujeres, especialmente los recién nacidos, también entran en el círculo al ser vendidos o utilizados como transporte de drogas.

La religiosa afirmó que ahora cuentan con el financiamiento de profesionales por parte del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación pero cuestionó las políticas a nivel nacional para prevenir la trata de personas. "Tiene que haber otro tipo de políticas, no sólo poniendo parches, hay que tener un programa claro de lucha y procesamiento de estos casos".